lunes, 30 de junio de 2014

Travesía


La locomotora lanza suspiros,
combustión incesante de
cruces.
El peregrino atravesó el
desierto,
pero los granos de arena
eran gotas petrificadas
de sudor.

Condenado a archivar tu risa en la penumbra.

Una trapecista desafiando
las alturas,
la soga es un trozo de
horizonte,
en tierra firme la sostengo:
lagrimas de arena se acumulan
en los relojes.

Condenado a archivar tu risa en la penumbra.

Las sábanas fueron zurcidas
con legajos de proyectos.
Temo que al despertar el invierno
toque a la puerta, sediento,
a pedir albergue.

Condenado a archivar tu risa en la penumbra. 

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