jueves, 30 de julio de 2015

Faisán marchito



esperando el agua hervir
de pie en la cocina
para beber una taza de té
bajativo necesario a mi almuerzo
la mirada se pierde en el vacío
te siento a mi lado

quisiera acariciar tu piel
sentir tu calor envolver mi cuerpo
deleitar mi ánimo con tu risa
gentil cadencia que espanta mis demonios

tras la eternidad de no saber de ti
escuchar tu voz, bálsamo reconfortante
oxígeno al claustro de gases tóxicos
la compañía de tu sonrisa
halo protector

hube de encontrarme con mi archienemigo
usurpador del amor de Vivi
cual juego viril o desafío machista
ahora me pide disculpas
atribuye al alcohol el desvarío
mella en su corazón
testifica que el error de la Vivi
fue obsesionarse con la aventura amorosa

tal vez yo cometa el mismo error
pavoneo en el rito de apareamiento
faisán de plumas marchitas
nunca aprendí, zaguero en la vida
esperanzado que el hastío no se apodere
de las figuras dibujadas en tu imaginario
en la memoria
si es que hubo algo entre nosotros

jueves, 9 de julio de 2015

Vida en fuga


tarde de sábado en casa
nubes amenazantes
el frío se adhiere a los objetos
al escritorio, a la lámpara mortecina
al televisor que emite descalabradas voces
a mi ropa tenue
a mi piel y mis huesos


escaso sueño hace alarde
en mis ojos fibrosos
semana laboral agotadora
el colofón es una siesta profunda
al alero del relato deportivo en la TV:
la Roja campeón de América


recuerdos que atraviesan fluidos mi cráneo
en la vereda opuesta estarás compartiendo
con tu marido y tu hija
tan trivial, de repente
se amplifican conversaciones
involuntariamente empleo tus palabras
tus ideas y ademanes


te extraño, amiga
por instantes creo que estás a mi lado
y las situaciones laborales y cotidianas
son aderezadas por tu risa efusiva
tus bromas ingeniosas
tu parpadeo de colibrí


las malas noticias se saben pronto:
ha muerto el deportista Carlo De Gavardo
mi espíritu aficionado es paupérrimo
mas lo escuché en una conferencia universitaria


emprendió rumbo al cerro en bicicleta
acompañado de su hijo adolescente
un infartó lo fulminó a los 45 años
¿cuán cerca está la muerte de nosotros?
vida en fuga, tiempo desperdiciado
momentos que escurren como agua
en el fregadero
esos muertos de mi historia comparten
la tertulia sentados a mi mesa
la sangre se me congela
el aliento se evapora