miércoles, 25 de mayo de 2016

El peregrino extraviado


Los años calan hondo en los huesos, Jorge
pesan tanto como un espejo trizado o una ilusión óptica
donde bailan los niños de Lautaro
que no pueden regresar a la infancia.

Estás en una encrucijada de rutas
y los letreros se escriben con lenguas muertas
el magnolio reseco luce exhausto
de un respirar absurdo y de sombras
que desean apuñalar a quien las proyecta.

Por la ventana de la clínica, el futuro
es un tornado de vacío
que evades al escribir misivas de amor
a una muchacha de rostro evanescente.

No se detendrá el ferrocarril en las estaciones
sólo verás el humo de una locomotora desdibujada
los durmientes suspendidos en el abismo
o encaminados hacia el túnel de tu siesta.

Antes de distinguir el atardecer
tú sabías más que los muertos.



Poema inspirado en el libro El molino y la higuera (1993), de Jorge Teillier, leído en el homenaje al poeta realizado por el Colectivo La Zalagarda, Si pudiera encontrar una palabra. Sech, 18 de mayo de 2016.