Si estudias Arte, morirás de hambre
resuena en mi cabeza de niño
lapidario consejo de la profesora
abre un surco en mi mapa cerebral
Cuántos mitos construidos
sobre un terreno de arena húmeda
trazan caminos que obligan un desvío
y las ilusiones se destejen al barranco
Hilvanando nuevos rumbos
abro senderos
rugosos surcos subterráneos
presionan por brotar bajo la piel
aturden el horizonte
emborrachan los puntos cardinales
Retrocedo siguiendo mis huellas
aspiro el oxígeno del planeta
arduo trabajo dilucidar
entre la ciénaga y el fértil terruño
No hay comentarios:
Publicar un comentario