Muchas vetas forman un Roble
que fluye sin claro sentido
pero una geografía aparece
al ver el caudal que avanza
rugoso, ríspido y rápido
con rabia, resentimiento, rojo
como berrinche de revolucionario
rabieta ridícula, aborrecible
rata rastrera. Mas con rigor
reniega raíces y rótulos
rebelde rebenquea rabos
rabillos del ojo y rumiantes reaccionarios.
Radical, arrogante, rubicundo
recorre riscos riendo
rufián y ruin, rueda y retrocede
remueve relaves, rígido rememora
y ansía reproducirse en rizoma.
Otro macizo corre a su lado
veta recóndita e invisible
línea transparente que el tronco
silencioso silba sílabas suaves
suspiros sensibles, secretos
sereno sisea siluetas
sensual- a veces- señala
sonetos, signos sempiternos
sueña sonidos sigilosos
serpentinas sinuosas y saltarinas
es sabio y sosegado
sonríe cual sibarita sabroso
con un salmón salado
sopesa serendipias con sapiencia
saberes de sumerios o sulfatos
siente sinceras situaciones
si su savia soslaya a los siniestros.
Sí, señoras y señores
así es el Robles solitario
entre la R y la S
el árbol despliega sus ramas.